sábado, 30 de marzo de 2013

Las Horas Distantes

Feliz Sábado Santo, ¿Qué tal lleváis estos días de fiesta? Aquí hartos de agua, no hay un día en el que no llueva, con lo que va apeteciendo un poco de sol, aperitivos en una terracita, paseos por la costa,…
Aunque en parte me ha venido bien que el tiempo no acompañe, estaba enganchada al último libro que cogí en la biblioteca. Lo elegí por casualidad, me llamó la atención el titulo: “Las Horas Distantes” y no había leído nada de su autora: Kate Morton aunque estos días estoy escuchando mucho su nombre ya que ha sacado una nueva novela.

 

Sentí curiosidad al leer la contraportada del libro:
"Comenzó con una carta. Una carta que llevaba extraviada mucho tiempo, esperando durante más de medio siglo en una saca de correos olvidada en el oscuro desván de una anodina casa de Londres…
Edie Burchill y su madre nunca han estado lo que se dice unidas. Pero un domingo por la tarde llega a su casa una carta, perdida hace tiempo, con el remite de Milderhurst Castle, en Kent (Inglaterra), y Edie empieza a pensar que la frialdad de su madre oculta un antiguo secreto.
Durante la Segunda Guerra Mundial, la madre de Edie fue evacuada de Londres y acogida por la misteriosa Juniper Blythe en Milderhurst Castle, donde vivía con sus hermanas gemelas y su padre, Raymond, autor del clásico infantil La verdadera historia del Hombre de Barro. El espléndido y enorme castillo le muestra un nuevo mundo en el que descubre la fantasía y el placer de los libros, pero también sus peligros.
Cincuenta años más tarde, cuando Edie busca las respuestas al enigma de su madre, se siente atraída por Milderhurst Castle, donde, ya ancianas, las excéntricas gemelas y Juniper viven todavía.
En el ya ruinoso castillo, Edie investiga el pasado de su madre. Pero hay otros secretos escondidos entre sus muros, y Edie está a punto de averiguar más de lo que esperaba. Lo que realmente sucedió en las horas distantes ha estado aguardando mucho tiempo a que alguien lo desvelara".

Fue leerlo y tener la sensación de ser elegida por el libro en vez de elegirlo yo a él, que me pedía que me lo llevara a casa. Suena a tontería pero siempre que voy a la biblioteca y paseo los dedos por las estanterías tengo esa sensación, salvo que vaya buscando algún libro en concreto. ¿Qué hace que cojamos un libro y no otro? ¿El título, el color de la portada o su dibujo? Siempre hay uno que te resistes a devolver a la estantería, que no quieres soltar y que te terminas llevando a casa y piensas que lo has elegido pero no es así. A mí siempre me ha gustado la idea de sentirme elegida, no lo elijo sino que me elige a mí para perderme por sus páginas, por su historia.

Es un libro que me ha gustado mucho, no podía dejar de leerlo, estaba enganchadísima. El final es un poco previsible pero no me ha defraudado. Lo recomiendo si aún no lo habéis leído, es una lectura amena y muy entretenida.
Se describe tan bien los sentimientos de los personajes, sus sensaciones, que enseguida te metes en la historia como si estuvieras ahí.
¿Conocíais este libro? ¿Y a la autora?
 

lunes, 25 de marzo de 2013

Tarta 3 chocolates

Feliz lunes. Comenzamos esta semana con ganas ya que es cortita, un último esfuerzo  tendremos unos días de merecido descanso.
Ayer fue el cumpleaños de una amiga y le organizamos una merienda sorpresa. Ya lo puedo contar porque llevamos una semana de secretismo total, que mal lo estaba pasando con tanto misterio e intentando que no se enterara de nada.
El sábado por la mañana hice la tarta, tenía que ser fácil así que tras mucho pensar me decante por la de 3 chocolates que queda muy vistosa y es bastante fácil de hacer.
No la había hecho nunca, en casa siempre la ha hecho mi madre, así que me daba un poco de miedo por si no quedaba bien pero al final fue todo un éxito.
Ingredientes:
300 gr. de chocolate negro no a la taza ni para fundir sino negro de min. cacao 55%
300 gr. de chocolate con leche
300 gr. de chocolate blanco
3 sobres de cuajada, yo use de Royal
3 paquetes de nata de 200 gr. cada uno
600 ml. de leche
Un cartucho de galletas María
75 gr. mantequilla

Falta la leche que no me dí cuenta en ese momento

Se tritura el paquete de galletas, se mezcla con la mantequilla derretida y se forra la base de un molde desmontable, el mío es de 26 cm. de diámetro. Se mete en la nevera para que se endurezca mientras hacemos la primera capa de chocolate.


Cogemos 200 ml. de leche y ponemos unos dos dedos en un vaso para diluir un sobre de cuajada. 


El resto de los 200 ml. de leche los ponemos en un cazo junto con un paquete de nata y las dos tabletas de chocolate negro troceadas, utilicé dos tabletas porque eran de 150 gr. cada una. Sin dejar de remover porque sino se pega el chocolate, hasta que empieza a hervir y el chocolate esta bien derretido. Se le añade el sobre de la cuajada disuelto en los dos dedos de leche que habíamos reservado y se remueve bien hasta que empieza a hervir.


Se echa en el molde volcando el contenido del cazo sobre la cuchara de madera con la que hemos removido para que no se nos levante la base de galleta y nos queden tropezones. Se expande bien por todo el molde y dejamos enfriar mientras hacemos la siguiente capa.


Cogemos 200 ml. de leche y reservamos dos dedos en un vaso para diluir el sobre de cuajada. El resto de los 200 ml. de leche los ponemos en un cazo junto con un paquete de nata y las dos tabletas de chocolate con leche troceadas. Sin dejar de remover porque sino se pega el chocolate, hasta que empieza a hervir y el chocolate esta bien derretido. Se le añade el sobre de la cuajada disuelto en los dos dedos de leche que habíamos reservado y se remueve bien hasta que empieza a hervir.


Se vuelca en el molde sobre la capa de chocolate negro que ya esta solidificada y mientras se enfría nos ponemos con la última capa.


Cogemos 200 ml. de leche y reservamos dos dedos en un vaso para diluir el sobre de cuajada. El resto de los 200 ml. de leche los ponemos en un cazo junto con un paquete de nata y las cuatro tabletas de chocolate blanco troceadas, estas tabletas son más pequeñas, de 75 gr. cada una. Sin dejar de remover porque sino se pega el chocolate, hasta que empieza a hervir y el chocolate esta bien derretido. Se le añade el sobre de la cuajada disuelto en los dos dedos de leche que habíamos reservado y se remueve bien hasta que empieza a hervir.


Se vuelca en el molde sobre la capa de chocolate con leche que ya se ha quedado dura.


Se deja enfriar a temperatura ambiente y se guarda en la nevera. Es mejor hacerlas con un día de antelación para que cuajen bien los chocolates.

El domingo antes de salir de casa la decore con unos fideos de azúcar de colores para que quedara más vistosa y alegre.

Menos mal que me acorde sacarle una foto antes de terminarla
  Aunque también se puede decorar con virutas de chocolate, huevos de chocolate pequeñitos o con chocolate derretido escribir el nombre del homenajeado o hacer dibujitos. Yo no tengo mucha maña para eso de la decoración y como tenía abierto un paquetito de los fideos de colores, opte por lo más sencillo.
La dejé en el molde para que no se me desmontara por el camino pero el fallo fue que al llegar a casa de mi amiga, como no tenía sitio en la nevera, la sacamos del molde enseguida y el chocolate blanco estaba un poco derretido por los lados, cayendo sobre los bordes. De sabor estaba muy buena y gusto mucho pero claro, ¿quién se resiste a tanto chocolate?

 





martes, 19 de marzo de 2013

Las ardillas de Central Park están tristes los lunes

Feliz martes. Ya se van notando los días más largos y va apeteciendo que haga bueno que para algo empezamos ya mañana la primavera, que se note.
Ya me he terminado el último libro de la trilogía que me estaba leyendo, “Las ardillas de Central Park están tristes los lunes” de Katherine Pancol.
En la contraportada pone lo siguiente:
La vida, a menudo, se divierte y, escondido en una palabra, una sonrisa, un billete de metro o el pliegue de una cortina, nos entrega un diamante capaz de colmar todas nuestras expectativas.
Para Joséphine el diamante podría ser la propuesta de su editor de que escriba una nueva novela, las llamadas de Philippe a las que no contesta o la incondicional amistad de su amiga Shirley. ¿Será Joséphine el diamante de Philippe? ¿Y cuál es el que persigue Shirley? Alrededor de estos tres personajes, todo un abanico de jóvenes -Hortense, Gary, Zoé, Alexandre- buscan también el diamante que ha de cambiar sus vidas para siempre, dejándose guiar por esas pequeñas piedras que van encontrando en el camino. Porque si nos detenemos un instante, si observamos con atención y nos atrevemos a coger lo que nos ofrece una mano tendida, la vida, probablemente, no volverá a cubrirse de tristeza. Ni el sábado, ni el domingo, ni tampoco el lunes…


En este último libro Joséphine y su familia va encontrado su hueco, cada personaje se encuentra y encuentra su diamante escondido.
Me ha costado leerlo, es un poco previsible y todo termina bien para todos los personajes, dándole el final que se espera. Me hubiese gustado un poco más de acción o que fuera menos previsible que eso de que todos encuentren su felicidad es poco creíble.
Aunque la historia no engancha demasiado es lectura rápida, para no pensar demasiado y así salimos de dudas sobre lo que le pasa a nuestra protagonista.
Sólo lo recomiendo si te has leído los dos anteriores y quieres saber como acaba la historia.
¿Conocías este libro?, ¿lo has leído?, ¿qué te ha parecido?.

miércoles, 13 de marzo de 2013

Ortografía

Feliz miércoles, ya estamos en el ecuador de la semana. Vaya frío hace hoy, con lo bueno que estaba haciendo y nos ha vuelto el invierno de golpe, vuelven a estar los montes nevados.
Ayer recibí un correo de una amiga que en mi opinión tiene mucha razón, es sobre la ortografía. En estos tiempos en los que nos comunicamos prácticamente vía sms, bueno ya vía Whatsapp, en los que ponemos las mínimas palabras posibles para ir más rápido y a ser posible adornado de caritas e iconos para no tener ni que escribir.
Hay que romper una lanza para defender nuestro idioma y sobretodo nuestra ortografía aunque en los mensajes escribamos abreviadamente es importante saber escribir correctamente que da dolor de ojos leer opiniones por la Web o carteles por la calle con unas faltas de ortografía terribles.

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domingo, 10 de marzo de 2013

Laredo

Feliz domingo, se acabo el merecido descanso semanal. Este fin de semana ha habido mucha vida social pero también ha tocado dormir, necesitaba una cura de reposo que llevo unos días que no paro quieta. También tenía muy abandonada mi casa, es lo que tiene irte un finde que cuando vuelves lo tienes todo pendiente.
Como ya os comente el finde pasado estuve con mis chavales en Laredo (Cantabria) en el albergue “Casa de la Trinidad”, llevado por las monjas trinitarias.

 




















Fuimos en autobús, en la línea Bilbao – Laredo – Santoña – Noja. Salimos a las 7 menos cuarto y para las 7:35 estábamos allí. El albergue esta muy cerca de la estación pero es una cuestita de piedras, muy rústica y muy bonita pero para llevar maletas con ruedas muy poco práctica.
Llegamos al albergue y hacía un frío allí dentro, es una casa antigua de piedra y como la semana anterior había nevado se había quedado el frío dentro. Subimos las escaleras, con las maletas a pulso, y vemos salir de una puerta una monja vestida de blanco como una aparición, vaya bote dimos. Nos dio las llaves y un par de mantas por persona ya que las habitaciones parecían neveras y como ellas se acostaban en breve iban a apagar la calefacción.
Las instalaciones están muy bien, cada habitación tiene baño integrado y hay una cocina comunitaria muy grande y muy  bien equipada. Pero pasamos un poco de frío sobretodo esa primera noche.
La mañana del sábado fuimos a dar un paseo por el pueblo, hacía un día muy bonito y había que aprovechar. Fuimos al túnel ya que nos lo aconsejaron en el bar en el que desayunamos. Es un túnel que atraviesa un monte y sale a un mirador sobre una playa de piedras. Tiene unas vistas muy bonitas para sacarse unas fotos.

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Aprovechamos para hacer las compras de lo que íbamos a comer los dos días y nos fuimos al albergue para hacer la comida. Nunca había cocinado para tantos, macarrones para 13 personas. Nos salió una olla como para medio pueblo y no veáis lo que pesaba para quitarle el agua. Ahora no sobro nada de nada, fueron todo un éxito, menos mal que los chavales son de buen comer.
A la tarde fuimos a la piscina municipal y el socorrista se porto muy bien con nosotros, como no había mucha gente nos dejo unos flotadores y balones para que jugáramos en la piscina pequeña. Lo pasamos muy bien.
Y a la noche tocó ir a ver el ambiente nocturno de Laredo, encontramos un bar que tenía buena música y por la consumición nos regalo una piruleta de corazón a cada uno, ya con eso nos gano por completo.
El domingo salió un día muy bonito también con el cielo azul y un solecito muy agradable así que fuimos a pasear por el paseo marítimo y es que Laredo tiene una playa enorme, con una arena dorada y muy fina. Y un paseo a lo largo de toda la playa con bancos, jardines, esculturas,… Es un buen sitio para pasear. 

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De vuelta al albergue para hacer ensalada y lomo para 13, estuvimos cerca de una hora friendo filetes, a la próxima bocadillos. Y a hacer la maleta y de camino a la estación de autobuses.
Me ha gustado mucho Laredo, no había estado nunca así que tengo que volver sobretodo en verano para bañarme en la playa. ¿Lo conocíais?


martes, 5 de marzo de 2013

El vals lento de las tortugas

Feliz martes. Ya estoy de vuelta, siento haber estado unos días desconectada pero he tenido mucho trabajo, y que no falte por favor; este fin de semana estuve con mis chavales de salida en Laredo (Cantabria), ya os contare en otra entrada porque no había estado nunca y me ha gustado mucho; y he estado toda enganchada a un libro que todo rato libre que tenía era para leer haber como terminaba.
El libro “El vals lento de las tortugas” de Katherine Pancol, es la segunda parte de “Los ojos amarillos de los cocodrilos” que os comenté hace poco. 

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En la contraportada pone lo siguiente:
Este libro es como una borrasca en medio de la vida…
El beso abrasador de aquel al que nunca debimos besar…
Un abrazo que es refugio o muerte…
 Un hombre inquietante pero encantador…
Una mujer que tiembla y espera ardientemente…
 Un hombre que miente…
Una mujer que cree dirigir el baile pero que ha perdido el paso…
Dos adolescentes más enterados que los mayores…
Un hombre que juega a resucitar…
 Un padre allá arriba, entre las estrellas… Musitando al oído de su hija…
Un perro tan feo que nos apartamos de su lado…

Personajes que avanzan tercamente, como pequeñas tortugas obstinadas.
Que aprenden a bailar lentamente, lentamente.
En un mundo demasiado rápido, demasiado violento.

Palabras que hasta que no te lees el libro no te dicen nada pero una vez leído se entiende todo a la primera.
Esta segunda parte sigue contando la historia de Joséphine Cortés y su familia.
Joséphine y Zoé se han instalado en un buen barrio de París gracias al éxito de la novela que finalmente ha reivindicado su verdadera autora.
Horténse se ha ido a estudiar moda a Londres y ve frecuentemente a Gary, el hijo de Shirley, quien también ha decidido vivir una temporada en Inglaterra. Philippe y su hijo también se han trasladado a Londres aunque van frecuentemente a París a visitar a Iris, ingresada en una clínica psiquiátrica por hallarse en una profunda depresión.
La madre de Joséphine y de Iris, Henriette, trama una venganza contra su ex marido y su amante, Josiane, quienes por fin han encontrado la felicidad y están extasiados con los poderes casi sobrenaturales de su hijo de meses. 


Me ha enganchado desde la primera hoja cosa que el anterior costó un poco más, será porque ya estas metida en la historia y quieres saber que pasa. De todas maneras la trama de este esta mejor, hay más suspense y no puedes dejar de leer para saber más. Pero hay algunas cosas que para mi gusto son un poco fantasiosas: la agresión a Horténse, las cualidades del pequeño Grobz,… Para ser un libro con él que tienes que sentir identificado en la vida de los personajes, hay cosas que lo veo poco realista. Pero es un libro que me ha gustado, es una lectura rápida y amena. Voy ahora a buscar la tercera y última parte para saber como acaba la historia. ¿La habéis leído?